MEMORIAL 3 DE MARZO DE 1976
El 3 de marzo de 1976 dejo una huella imborrable en Zaramaga, escenario de la masacre donde se encuentra la iglesia de San Francisco. Este barrio se creó a finales de los años 50 como una zona residencial cerca de los polígonos industriales. Gente procedente de otros lugares de España, como Extremadura o Salamanca, emigraron a Vitoria-Gasteiz por su incipiente actividad industrial y para ellos, trabajadores de estas fábricas, como Forjas Alavesas, se construyó el barrio de Zaramaga. La iglesia de San Francisco se convirtió en uno de los puntos neurálgicos de la zona transformándose en uno de los espacios en los que se celebraran las asambleas durante los meses de huelga.
​
Ahora, una visita guiada da la oportunidad de sumergirse en la historia del 3 de marzo, no solo en los hechos concretos de ese día, sino en todo el contexto que englobaba esa lucha. Un recorrido por el barrio de Zaramaga con paradas en puntos concretos donde distintas obras de arte representan aspectos diferentes de lo acontecido aquellos días en el barrio y explicando las condiciones en las que se vivieron estos hechos. Juan Ibarrondo, escritor del libro Recuerdos de Marzo y guionista de la película Vitoria, 3 de marzo, fue el que diseñó esta ruta.
Esta visita, que mezcla arte y memoria, tiene una duración aproximada de dos horas, se vive de una manera diferente a lo que puede ser una ruta tradicional y es que los propios guías lo califican como una “mesa redonda andante”. Pretende ser un espacio para debatir y compartir ideas, vivencias e inquietudes a la vez que un audioguía (en castellano, euskera o inglés) va explicando detalles de la visita que complementan las explicaciones de los guías.
1. MARTXOAK 3 ELKARTEA
El punto de inicio de esta visita es la sede la Asociación de Víctimas del 3 de Marzo. La asociación se creó en el año 1999 reuniendo a familiares de los cinco asesinados y víctimas que vivieron aquella masacre. Desde ese día su lucha se basa en cuatro pilares fundamentales: verdad, justicia, reconocimiento y reparación.
Foto: Berria
Foto: @Martxoak3
2. MONOLITO AL 3 DE MARZO
La primera obra que se visita es la más conocida referente a los hechos del 3 de marzo. Se trata de una mano izquierda de hierro alzada representando la lucha obrera y rindiendo homenaje a los cinco obreros que fueron asesinados. Este monolito lo realizaron trabajadores de Forjas en el décimo aniversario de los hechos. Está situada en un lugar muy simbólico, justo enfrente de la iglesia de San Francisco y en el punto exacto donde murió Jose Mª Martínez Ocio. Escritas en él se pueden leer las palabras "1976ko martxoaren 3 gogoan zaituztegu" ("3 de marzo de 1976, te recordamos").
Foto: Zuriñe Gómez
3. LA FUERZA DE LA RAZÓN Y LIBERTAD/ASKATASUNA
En la ahora llamada Plaza 3 de Marzo se encuentra una escultura realizada por Iñigo Arregui en el año 2013. Con el nombre de La fuerza de la razón, esta obra es un recuerdo a lo acontecido en la ciudad hace más de 40 años. Es una estructura metálica que lleva escrita los nombres de los cinco fallecidos en Gasteiz y de los dos posteriores en Basauri y Tarragona, junto con sus fotos. Además, se puede leer una breve texto que resume los hechos y el contexto en el que estos se desarrollaron.
En una de las fachadas de la iglesia de San Francisco se encuentra la obra Libertad/Askatasuna, una gran lona realizada por la artista Txaro Arrazola. Se trata de una reinterpretación de una de las imágenes más famosas del funeral celebrado el 5 de marzo en la Catedral Nueva que, según la autora, busca unir dos lugares que fueron tan clave durante esos días. El título Libertad, guarda una relación con prohibición existente durante el franquismo para poder reunirse. Este fue el motivo por el cual los obreros tenían que elegir lugares como las iglesias para poder reunirse, aunque Franco ya hubiera muerto hacía casi cuatro meses.
Foto: Zuriñe Gómez
Foto: Zuriñe Gómez
4. NO HAY PRESENTE NI FUTURO SIN MEMORIA
No hay presente ni futuro sin memoria es el título del gran mural que decora desde 2013 el barrio de Zaramaga, testigo de la masacre de 1976. Javier Hernández Landazabal fue el artista encargado de la dirección de este proyecto que respondía a una de las aspiraciones a cumplir por parte de Martxoak 3 Elkartea. El mural está diseñado a modo de retablo, lo que significa que la parte central es más importante y las otras son una introducción y un colofón. En este caso, la parte superior representa el Franquismo, la central el propio 3 de marzo de 1976 y la parte inferior, la etapa posterior de recuerdo y memoria que se abrió tras los hechos.
5. JUSTICIA Y SOLIDARIDAD
​
Las obras Solidaridad y Justicia de Txaro Arrazola son la siguiente paradas del memorial. En primer lugar, Solidaridad consiste en un colaje de imágenes digital. En él se ven cinco buzos de trabajo azules, los propios de los obreros en huelga formando una cadena humana representando la solidaridad que definió el movimiento obrero de aquellos meses. Los buzos están unidos por lo que pueden ser guantes de boxeo rojos o gotas de sangre, un doble sentido que une la lucha de los trabajadores y las fatales consecuencias que tuvo con cinco asesinados.
Foto: Zuriñe Gómez
Por otro lado está la obra Justicia. Esta palabra es sin duda una de las que más representa al 3 de marzo porque fue aquella que un compañero de Pedro Mª Martínez Ocio escribió en el suelo con su sangre tras recibir el disparo que acabó con su vida. La tipografía con la que está diseñada esta pancarta también guarda un sentido y es que está realizada con el estampado que tenían las bolsas de la compra que las mujeres de aquella época utilizaban.
Foto: Zuriñe Gómez
6. HÉROES
​
Héroes es una de las obras de Verónica Werckmeister que se pueden ver durante el recorrido. Esta pieza que juega con la perspectiva tiene dos partes. Una de ellas es la dedicada al 3 de marzo, con la representación de una fotografía de alguna manifestación realizada en Vitoria-Gasteiz sobre estos hechos. En ella se ve a muchas personas portando pancartas y las imágenes de las cinco víctimas. Además, todo ello está acompañado con muchos cartuchos explosivos. La otra representa la lucha llevada a cabo por otros líderes en lugares como La India o Polonia, también acompañado de multitud de cerillas.
Foto: Zuriñe Gómez
Foto: Zuriñe Gómez
7. MÁS QUE VER
​
Esta es la segunda obra de Verónica Werckmeister que sigue la misma técnica que la anterior: dos estructuras de hierro con metacrilato vinilado. En esta pieza se puede ver pintada la antigua fábrica de Forjas que tenía una extensión enorme que ahora ocupa un centro comercial. No es casualidad, por tanto, el lugar elegido para exponer esta obra, ya que se encuentra justo enfrente de lo que antiguamente era la fábrica.
Los edificios próximos a Forjas, actual centro comercial, estaban construidos de una manera estratégica. Los más cercanos eran los que estaban construidos con peores calidades y eran habitados por los obreros. Estos ocupaban el peldaño más bajo en la jerarquía de la empresa y eran los que respiraban todos los humos procedentes de la fábrica. A medida que van para atrás, las casas están edificadas en mejores condiciones e iban siendo ocupadas en relación al cargo que los trabajadores ostentaran dentro de la empresa.
Foto: Zuriñe Gómez
8. EL PODER DE LAS MUJERES
​
El papel de las mujeres durante los meses de lucha fue clave y, sin embargo, hasta hace poco no se había hablado de él y reconocido como tal. Trabajadoras de fábrica, amas de casa, estudiantes, enfermeras, compañeras de líderes sindicales… fuera cual fuese su papel, resultaron igual de fundamentales. Comenzaron a organizarse entre ellas, formaron la Asamblea de Mujeres y crearon la caja de resistencia para poder salir adelante económicamente durante los meses de huelga. Sin duda, uno de los momento más recordados de este proceso fue la llamada "Manifestación de las bolsas vacías", una marcha que emprendieron la mujeres por las calles de Gasteiz con las bolsas de la compra vacías, en protesta por la carestía de la vida. La escultura de Irantzu Lekue representa este episodio tan particular y está situada en una de las calles más próximas a la iglesia de San Francisco.
Foto: Zuriñe Gómez
9. LA IGLESIA DE SAN FRANCISCO
​
La última parada de este memorial es el escenario de lo que fue la masacre: La iglesia de San Francisco. En los cristales de la fachada aún se pueden observar los disparos efectuados por los policias. En el interior, solo se puede acceder a un espacio muy reducido donde se pueden ver dos obras realizadas por Sandra Santos y Marta Gil. La primera de ellas realizó la obra Memorias grabadas a fuego, cinco colajes en homenaje a cada obrero fallecido. La segunda Un gol cuenta es un futbolín que representa el partido que tuvo lugar durante esos meses entre las trabajadoras en huelga y las mujeres de los obreros en huelga. El fin de este encuentro deportivo era conseguir fondos para la caja de resistencia.
​
Como colofón a esta visita inmersiva, un video cuenta lo sucedido en Vitoria-Gasteiz aquel 3 de marzo de 1976.
Foto: gasteizm3m.org
Foto: gasteizm3m.org